¿Tengo Gran Ganancia?
«Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento.»

1 Timoteo 6.6

Hay veces que nos es necesario huir de algún peligro físico que nos amenaza. Si el temor es suficientemente fuerte, lo que más nos importa es poner máxima distancia entre nosotros y lo que nos amenaza. En tal caso corremos sin seguir nada sino el impulso de huir.

Dios no quiere que huya de Satanás, del mundo, y del pecado de tal manera.

«Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre» (1 Timoteo 6.11).

Dios quiere que huya, sí. Pero no al azar.

En mi huir hoy, me propongo a seguir las seis virtudes que El me ha puesto delante en este versículo.