Alabanza a su nombre
«No vuelva avergonzado el abatido;
El afligido y el menesteroso alabarán tu nombre.»

Salmo 74.21

Lectura: Salmo 74

Un rey ha de recibir sumisión y servicio.

Y honra y lealtad.

También debe recibir impuestos.

Y regalos de vez en cuando.

«Pero Dios es mi rey desde tiempo antiguo;
El que obra salvación en medio de la tierra»
(12).

Tú, Señor Jesucristo, eres mi Soberano. ¡Qué mi vida refleje amplia y claramente esa realidad!

[Tuyo es el día, tuya también es la noche (Salmo 74.16)]
tomado de Salmo 74.16

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